ELECTRICIDAD
CARRETEL DE RUHMKORFF
Consiste en un largo carretel de cautchuc endurecido, con borde también de cautchuc o de vidrio. El carretel está previamente envuelto por un hilo de cobre aislado, grueso y corto, que lo rodea en toda su extensión, y debe servir de conductor a la corriente inductora, destinada a magnetizar la masa central del hierro dulce. Las extremidades de este hilo vienen a prenderse en las dos columnas de vidrio, en la tabla sobre la cual descansa el aparato.
Sobre esta primera circunvolución hay enroscado otro hilo de cobre forrado de seda, pero de diámetro pequeño, y cuya largura varia entre 8 y 150 kilómetros, porque la extensión del hilo, por la resistencia que opone al paso de la electricidad, es la primera condición para que esta tome una gran tensión. Este segundo hilo, además de esto, se halla aislado con el mayor esmero por medio de un barniz de goma laca, y sus extremidades terminan en otras dos columnas de vidrio.
En el eje del carretel hay un haz de hilos de hierro dulce.
El aparato está fundado en el principio que consiste en hacer pasar, en muy cortos intervalos, una sucesión de corrientes eléctricas en el hilo grueso, puesto en comunicación con una pila. El haz central de hierro dulce, magnetizándose y desmagnetizándose, actúa por inducción sobre la circunvolución del hilo delgado, y se desarrolla una serie de corrientes inducidas, que producen chispas, conmociones y otros efectos eléctricos.
El carretel de Ruhmkorff presta grandes servicios en las ciencias industriales, y su inventor, distinguido químico alemán, obtuvo del emperador Napoleón III, en 1864, el premio de 50,000 francos, que este soberano había prometido a quien inventase una nueva e importante aplicación de la pila galvánica a la industria.
Para las aplicaciones médicas Ruhmkorff modificó este aparato, reduciendo sus dimensiones con el fin de hacerlo portátil: bajo esta nueva forma son muy extensos los límites de su intensidad.
Este aparato se divide en tres partes: la primera, contiene los dos pares de la pila que pone el aparato en acción. Estos pares son formados de zinc amalgamado y de carbón; y la sustancia con que se hace funcionar la pila es el bisulfato de mercurio contenido en el frasco que se halla en la segunda parte. Estos pares son bastante fuertes, y no producen emanaciones durante la operación.
La segunda parte, encierra el aparato propiamente dicho: son dos carreteles fijos de un lado por una armadura de hierro dulce parecida al carretel, si bien de menores dimensiones. Los carreteles están cubiertos con dos hilos: uno grueso por el cual pasa la corriente de la pila, y el otro más fino, aislado. Las puntas del hilo fino terminan en donde se ponen en comunicación con los conductores que reciben las corrientes inducidas, las extremidades del hilo grueso terminan, y aquí es donde se reciben las corrientes inductoras o extracorrientes. Para moderar la fuerza de las corrientes inductoras e inducidas, un cilindro doble de cobre plateado envuelve ambos carreteles, y mediante un botón estos se descubren más o menos.
Por último, la tercera parte contiene los accesorios del aparato, a saber: los cilindros metálicos, el frasco de bisulfato de mercurio, y los conductores.
Modo de hacer funcionar el aparato.
Saqúense las piezas de zinc y los vasitos de carbón, que componen los elementos de la pila. Póngase en cada vaso de carbón, con la cuchara de vidrio que va en la caja, dos o tres de esas cucharadas de bisulfato de mercurio; añádase agua hasta llegar a la cuarta parte del vasito, y se revuelve con la misma cuchara. Vuélvase a poner cada cosa en su sitio.
El aparato entra inmediatamente en actividad. Aplícanse entonces los conductores según el género de corriente, inductora o inducida, que el enfermo deba recibir, y se dirigen dichos conductores a los lugares afectados.